Este anuncio (de hace algunos meses) posee un transfondo muy bonito, muy emocionante, de donde podemos observar la inocencia de los niños y cómo ellos viven felices sin ningún tipo de prejuicios ni estereotipos.
Los niños viven su realidad, una realidad diferente a la de los adultos o jóvenes. No entienden de razas, ni de etnias, ni de banderas, ni fronteras. Estos conceptos los van adquiriendo conforme crecen porque se les enseña o lo aprenden.
También es cierto que el contexto social en el que viven influye bastante, pero eso es otro tema en el que no vamos a entrar.
En definitiva, este anuncio nos muestra la diversidad que encontramos en las personas y que los niños no distinguen, pero que poco a poco sabrán que se trata de diversidad.
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